«Fragmentos seleccionados. Rincones escogidos»

Segunda exposición de socios y socias de la A-FAD. En este caso, la muestra tiene lugar en el Centro de Arte Contemporáneo La Sala, en Vilanova i la Geltrú, y se podrá ver del 26 de marzo al 16 de mayo.

Veintiún autores han aceptado el reto de combinar las herramientas y técnicas propias de sus disciplinas creativas con otros formatos, materiales y conceptos. Se han reunido creadores de la A-FAD con otros artistas emergentes de Vilanova i la Geltrú que también trabajan sobre la base de los oficios.

Los artistas participantes son: Albert Llobet Ascaso, Assumpció Espada, Carol Fleischman, Elisabet Sánchez Díaz, Eva Blanes, Félix Lozal, Francesca Piñol Torrent, Francesca Pozas, Barbaformosa, Isona Ten, Kima Guitart, Laia Adsuara Nadeu, Laura Surroca Vilarnau, Melcior Martí, Pamela Pérez, Patrícia Aguiló Bestard, Patricia Hugues, Teresa Casanovas, Teresa Rosa Aguayo, Victòria Rabal Merola y Ximena Pérez Grobet

Texto comisarial de Josep Ramon Fontana

A finales de los noventa Freddie Mercury lo quería todo y lo quería en el momento: “I want it all and I want it now”.

Lo sentimos de corazón, Freddie. Pero no podrá ser.

Ya hace tiempo que sospechamos que todo el mundo no podrá tenerlo todo. E incluso se nos invita a renunciar a la aspiración de tener demasiado. Se nos dice que debemos vivir igual que viajamos en avión, solo con el equipaje de mano y dispuestos a abandonarlo si es necesario un aterrizaje de emergencia.

La idea no es demasiado estimulante porque preparar un buen equipaje de mano es más complicado de los que parece. No hay lugar para cosas superfluas, d emodo que debemos seleccionar muy bien. Puede que tengamos suficiente con las excepciones y no hace falta que nos llevemos las reglas. O puede que tomemos los fondos y dejamos las formas. O cogemos las preguntas y confiamos que ya iremos encontrando las respuestas.

Otra forma de aprovechar el espacio de nuestro equipaje es optar por los fragmentos. Si son los fragmentos adecuados, a partir de ellos podemos reconstruir el objeto del cual nos hemos desprendido. Y si son en los rincones adecuados, podremos volver a los espacios que los contenían. O, todavía mejor, recrearlos.

Conforme los cambios del mundo se aceleran, nos van limitando nuestro equipaje vital. Pero afortunadamente todavía podemos escoger qué ponemos dentro. Y escoger no es solo un acto de renuncia, también puede ser un potente gesto de afirmación.